¡Dale un poco más! ¡Ya termina! ¡Un último esfuerzo! Palabras
de aliento para incentivarte, para que logres a hacer ese último pique, a
luchar la última pelota del partido, buscando sumar un gol al marcador o
simplemente mantener el resultado.
Lamentablemente para mí no fue así. Algunos me dijeron que fue
mala suerte, otros que son cosas del fútbol, yo no lo creo así; toda una vida
llena de responsabilidades en un mundo donde la responsabilidad carece, donde
no se le toma demasiada importancia a las cosas, uno quiere llegar a ser
diferente, tomarse las cosas con la debida importancia que merecen, pero no
alcanza; porque cuanto más uno se esfuerce por hacer las cosas bien, más
presión uno tiene.
-¿No estaré a la altura del plantel de Primera? Me pregunté.
Me he cuestionado muchas cosas en este tiempo, una lesión no
es nada lindo. El deportista tiene que amar lo que hace para poder hacerlo
bien, si uno no ama lo que hace, el éxito se va a otorgar inalcanzable y no
habría emociones que nos motiven a seguir y seguir para lograrlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario